Actualmente países como Costa Rica, Chile y México desarrollan diversos proyectos de innovación tecnológica para mejorar la experiencia de miles de usuarios en centros financieros.
Dentro de las tareas que hoy lleva adelante el equipo Lazarillo, y de la mano con probados recursos tecnológicos, está la de ampliar y ejecutar nuevos parámetros de acceso a diferentes lugares e instancias.
El escenario global y los múltiples requerimientos de un enorme grupo de personas lo exigen, sobre todo si se trata de aspectos fundamentales y cotidianos en los cuales se necesita una real evolución a la hora de realizar trámites de toda índole.
Y es en uno de estos puntos donde queremos detenernos, para compartir una parte de esta historia en constante avance. Es así como en nuestros horizontes surge la banca, con servicios casi totalmente digitalizados y al alero de tecnologías que hoy permiten aumentar la movilidad financiera de las personas…
Pero ¿De todas las personas en realidad?
Fue durante 2019 y en un periodo de pre pandemia, cuando iniciamos conversaciones con Banco de Chile. Sin embargo no sospechábamos los alcances de estas primeras gestiones, más aún con las numerosas modificaciones que pronto generaría en el mundo un contexto sanitario para el cual simplemente no estábamos preparados.
Esto suponía nuevas formas y protocolos de atención, condicionados por el cierre de sucursales y un aforo permitido que disminuía cada vez, dejando a cientos de clientes en la nebulosa más absoluta a la hora de recibir una respuesta.
Pero ahí estuvimos, siempre apegados a nuestros principios básicos y creando instancias de accesibilidad. Y esta vez, dichas instancias se tradujeron en un nuevo espacio de noticias dentro de la app, por medio de las cuales pudimos conectar a nuestros usuarios con la información actualizada que surgía con el desarrollo de la pandemia y sus cambios.
Ya en 2021 y también en Chile, otra entidad bancaria quiso apostar en el ámbito de la accesibilidad para sus clientes. Así retomamos la gestión con Banco Estado, que si bien ya había implementado sistemas de geolocalización y navegación interna por medio de Lazarillo en varias sucursales, decidió sumar a este desafío a su red con cientos de cajeros automáticos audibles en todo Chile.
Un adelanto que ha beneficiado a muchas personas con discapacidad visual y que funciona conectando audífonos al dispensador de dinero, lo que deja la pantalla principal en negro y sólo verbaliza las funciones a través de los auriculares. Lo anterior supone una mayor privacidad al momento de operar estos dispositivos, permitiendo a clientes ciegos y con baja visión efectuar sus transacciones de forma más segura y autónoma.
Finalmente, a este proceso se suma la tecnología de Lazarillo, con la cual los usuarios pueden ubicar el cajero automático más cercano mediante la app, buscando desde el perfil de Banco Estado en la plataforma o desde la categoría de Bancos y Cajeros.
Allí encontrarán información sobre horarios, direcciones y atención en general, con lo cual se reduce notablemente la incertidumbre y se otorgan más opciones para quien las necesite.
Avances que ya se podían visualizar en pleno 2020, de lo que incluso da cuenta uno de nuestros blogs y que les compartimos en el siguiente link:
https://lazarillo.app/es/2020/12/23/lazarillo-y-banca-accesible-en-el-mundo-un-nuevo-desafio/
Otro de los hitos que Lazarillo ha desarrollado el último tiempo, dice relación con el trabajo junto a Bac Credomatic, entidad bancaria de Costa Rica que ha puesto todos sus recursos y disposición para ofrecer espacios muy amigables y mayor comodidad a clientes en situación de discapacidad visual.
Fue en 2019 cuando dicha institución financiera contactó al equipo Lazarillo, interesados en ampliar sus servicios y posibilidades de accesibilidad para la población costarricense.
Y es que si bien se trata de un país pequeño, más del 20% de su población vive en condición de discapacidad. Esto sumado a una gran visión de futuro, instó a que los ejecutivos de Bac Credomatic decidieran dotar de tecnologías accesibles a centros de atención, cajeros automáticos y sucursales junto a la app Lazarillo.
El propósito es claro para Laura Moreno, vicepresidenta de relaciones corporativas de Bac Credomatic. De ahí es que resalta la importancia de un servicio con 0 discriminación y mayor comodidad para todas las personas.
“Tenemos un compromiso con la inclusividad y una cultura de cero discriminación, por eso seguiremos invirtiendo en funcionalidades que nos permitan sumar esfuerzos en esa línea. Esperamos que para el 2022 las 42 sucursales del banco en todo el país cuenten con este sistema”, indicó Moreno.
Ver nota de prensa en este link:
Hoy, Bac Credomatic no sólo cuenta con accesibilidad física para sus clientes en sucursales estratégicas, ya que también está la posibilidad de realizar operaciones en sus atms y dispensadores de dinero.
Junto a ello disponen de una plataforma llamada Sara, que facilita la comunicación entre ejecutivos bancarios y personas con discapacidad auditiva y que conforman así una gran alternativa de usabilidad.
Una tarea global que no sólo implica la actualización de tecnologías, sino además la posibilidad de generar y mantener un feedback constante hacia los públicos que en la actualidad han determinado el uso de Lazarillo como herramienta indispensable de desarrollo, tanto a nivel personal, educativo y laboral.
Alcances que también nos llevan a seguir vinculándonos con nuevos actores, en países tan diversos como México, Argentina, Perú y otros más de la región, cuyo interés e inquietudes por lograr una transformación digital de cara a un mundo accesible e inclusivo sea un bien superior.
Además de esto, atendiendo a leyes de accesibilidad, como las del caso chileno, que exigen a todos los bancos ofrecer contratos accesibles, de acuerdo a la ley N° 19.496, que dice lo siguiente:
Artículo 17.- Los contratos de adhesión relativos a las actividades regidas por la presente ley deberán estar escritos de modo claramente legible, con un tamaño de letra no inferior a 2,5 milímetros y en idioma castellano, salvo aquellas palabras de otro idioma que el uso haya incorporado al léxico. Asimismo, los contratos a que se refiere este artículo deberán adaptarse con el fin de garantizar su comprensión a las personas con discapacidad visual o auditiva. Las cláusulas que no cumplan con dichos requisitos no producirán efecto alguno respecto del consumidor.
